La inseguridad es un rasgo de la personalidad que nos aleja de las demás personas y provoca un enorme sufrimiento emocional. La necesidad del trabajo interior.
La inseguridad es algo que necesitamos reconocer y trabajar internamente porque es un rasgo que nos aleja de los demás y nos puede causar un gran sufrimiento emocional. ¿Qué sucede en una pareja, o en un vínculo de amistad o trabajo, cuando uno de los dos es inseguro?
Te invito a considerar las principales características de alguien inseguro:
1. Le pone un cerco a su
espacio personal
No permite que los demás le hagan sugerencias ni le aporten nada. Es individualista. ¿La razón? Cree que ese es “su” espacio y nadie tiene derecho a invadirlo. Algunos “alambran” su trabajo, su familia, sus amistades, etc. y no dejan que otros ingresen en ese mundo. El deseo de alguien de ingresar allí para compartir o hacer algún aporte lo viven como una intromisión.
2. Va detrás de símbolos
exteriores
La persona insegura busca tapar su inseguridad con objetos de marca, posiciones o títulos, contactos y todo aquello que implique un nivel de vida elevado. Cuando uno es seguro, no precisa nada de afuera. Pero la inseguridad nos lleva a querer mostrar algo que en realidad no somos o no tenemos. Perder alguno de estos símbolos exteriores acarrea un profundo dolor emocional.
3. Grita y pelea e intenta
imponerse de esa forma
Alguien que grita, golpea e insulta está demostrando que no cuenta con recursos interiores para enfrentar una situación. Lo mismo sucede con la persona que envía mensajes intimidantes o sube frases agresivas a las redes sociales. Es un ser humano probablemente inseguro que esconde su inseguridad con la violencia. Por lo general, es también rígido e híper moral y expresa: “Esto es así y punto”; o: “Eso está muy mal”.
4. Se siente intimidado por
la seguridad de los demás
La persona insegura no tolera a alguien seguro de sí mismo. Le molesta que a otro le vaya mejor que a él, que feliciten a otro (y a él no). El que nos cuestiona todo lo que hacemos y está pendiente de nosotros es alguien inseguro. En realidad, le teme a la autoconfianza de los demás pero jamás lo admitirá.
Trabajo interior
¿Cómo podemos trabajar en nuestra propia seguridad? Básicamente de dos maneras:
l Parándonos en quiénes somos. Es decir, sabiendo que no valemos por lo que hacemos, tenemos o sabemos sino por lo que somos: seres humanos libres con un potencial ilimitado capaces de alcanzar todos los sueños que nos propongamos alcanzar.
l Sabiendo cuál es nuestro espacio y no cercándolo. Cuando somos seguros, aceptamos un consejo, una propuesta, una ayuda. No nos enojamos ni nos sentimos humillados porque tenemos claro cuál es nuestro espacio y nuestro rol en la vida en todos los ámbitos.
Todos somos como somos debido a la interacción con los otros. El carácter es formado cuando nos relacionamos con gente y compartimos experiencias. Pero cuando uno se determina a crecer y alcanzar su mejor versión, se vuelve alguien seguro que deja de cercar, de competir, de pelear con todo el mundo. Es feliz porque sabe quién es y se acepta y respeta con defectos y virtudes. Y también es capaz de ayudar a otros a mejorar y avanzar en la vida.
Frente a la inseguridad
1) Prensar en positivo. Cambiar el polo de los pensamientos puede ayudar a descubrir un enfoque sin tantos temores, vacíos o angustias. Ser crítico con uno mismo como con los demás, pero sin que eso paralice.
2) Ver las debilidades. No es posible lograr la perfección, así que hay que conocer las debilidades propias, asumirlas, aceptarlas y transformarlas.
3) No compararse con nadie. Cada uno es cada uno, diferente y especial, por eso no es necesario tomar a nadie como referencia para sentiste inferior.
4) Compartir los pensamientos. Es importante compartir los pensamientos con personas cercanas, ellos pueden ayudar a hacernos sentir un poco más seguro cada día, a transitar por esas situaciones o experiencias que son necesarias de trabajar.
Fuente: Clarín
Fecha: 5-5-2019
